Accesibilidad al alcance de todos: rampas, plataformas y sillas salvaescaleras

¿Te cuesta subir escaleras o moverte por ciertos espacios? Con una rampa, una plataforma o una silla salvaescaleras, moverse vuelve a ser fácil. 

¡Aquí te contamos cómo recuperar la libertad en casa!

La rampa, la solución más sencilla y versátil

Cuando hablamos de accesibilidad, la rampa para silla de ruedas es lo primero que suele venir a la mente. Y no es para menos. 

Es una solución práctica, económica y rápida de instalar, ideal para superar pequeños desniveles como escalones o entradas a edificios.

Existen rampas fijas, portátiles y telescópicas, cada una pensada para distintas situaciones. 

Las rampas portátiles, por ejemplo, son perfectas si necesitas una solución temporal o transportable, mientras que las fijas son ideales para instalaciones permanentes, ya sea en casa o en espacios públicos.

Lo importante es que estén bien diseñadas: con una pendiente adecuada, superficie antideslizante y barandillas si es necesario, para garantizar la seguridad y comodidad en el uso diario.

Plataformas elevadoras, accesibilidad sin esfuerzo

Cuando las escaleras son un obstáculo insalvable y el espacio no permite instalar una rampa larga, una plataforma elevadora es una opción excelente. 

Este tipo de solución permite salvar varios niveles verticales sin esfuerzo físico, simplemente con pulsar un botón.

Son especialmente útiles en edificios públicos, comunidades de vecinos o viviendas unifamiliares donde viven personas con movilidad reducida o usuarios de silla de ruedas. 

La plataforma se desplaza vertical u oblicuamente, y puede instalarse en interiores o exteriores, adaptándose al entorno sin grandes obras.

Además, son seguras y fáciles de usar. Cuentan con barandillas, sistemas anticaídas y mandos accesibles para que cualquier persona pueda utilizarlas con total autonomía.

Sillas salvaescaleras, la solución perfecta para el hogar

Si vives en una casa con escaleras y la movilidad empieza a ser un problema, una silla eléctrica para escaleras puede ser clave para mantener tu independencia. 

Una de sus grandes ventajas es que se adaptan a diferentes tipos de escaleras: rectas o con descansillos. 

Además, ocupan poco espacio, se pliegan cuando no se usan y pueden integrarse estéticamente en la decoración del hogar.

Una silla salvaescaleras portátil no requiere obras. Y lo más importante: te permite seguir usando tu casa con total libertad y autonomía.

¿Qué solución es mejor para ti?

Elegir entre una rampa, una plataforma o una silla salvaescaleras depende de varios factores: el tipo de barrera arquitectónica, el espacio disponible, tu nivel de movilidad y, por supuesto, el presupuesto.

• Si necesitas salvar uno o dos escalones, una rampa portátil o fija puede ser suficiente.
  
  
• Si usas silla de ruedas y necesitas acceder a un nivel superior en un espacio reducido, una plataforma elevadora será más adecuada.
  
  
• Si te cuesta subir escaleras, pero no quieres hacer una obra, la mejor opción probablemente sea una silla salvaescaleras.

Lo ideal es que consultes a un profesional que valore tu caso y te oriente hacia la mejor opción. 

Gana calidad de vida

Invertir en accesibilidad es una forma de cuidar tu bienestar, tu salud emocional y tu independencia. 

El simple hecho de no depender de otros para moverte dentro de tu casa o acceder a un edificio puede cambiar tu día a día.

La accesibilidad también es tranquilidad para tus seres queridos, que saben que te mueves con seguridad.

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Tu bienestar empieza por un entorno sin barreras. ¿Aún te lo estás pensando?